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Los números hacen 'buena' la teoría
UD ALMERÍA

Los números hacen 'buena' la teoría

Corona afirmó que la situación actual es la que esperaban antes de iniciarse la Liga BBVA al tiempo que confía en lograr el objetivo de la salvación

JORDI FOLQUÉ

Lunes, 19 de enero 2015, 23:45

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Final de la primera vuelta y el primer capitán que le tocaba dar la cara. Como hace siempre. Para las buenas y, sobre todo, para las malas. Esta vez fue tras caer la UDA a puestos de descenso justo en el ecuador de una competición un tanto extraña para los intereses rojiblancos. El conseguir cuatro veces más puntos a domicilio que como local no es muy normal. Como tampoco lo es el haber finalizado la primera parte de la competición sin haberles dado una victoria a los suyos en el Estadio de los Juegos Mediterráneos en la Liga BBVA. Unos números que han dejado sin el premio que se merecían los 13 puntos conseguidos lejos de Almería. Una cifra muy respetable que ha compensado, un tanto, el gran déficit de puntos como anfitrión.

En su amplia comparecencia ayer ante los medios, el talaverano fue realista a la vez que sacó su grado de optimismo. Lo primero porque «no podemos negar la realidad». Lo segundo, «porque creo en lograr el objetivo de la salvación». Dos aspectos complementarios y que se pueden dar. La primera parte ya se ha convertido en pasado. La segunda, depende de lo que hagan en las 19 jornadas que restan para acabar el campeonato para ver si es verdad lo dicho en su pensamiento o se queda en nada.

Pese a que la derrota ante el Valencia estaba todavía reciente, el hecho de que no haya Copa del Rey esta semana para la UDA permite que el plantel tenga un mayor tiempo para la reflexión sobre lo pasado en las anteriores 19 jornadas. Por lo vivido (sobre todo sufrido) desde que comenzara la competición a final de agosto. Mucho tiempo (o poco según se mire) para que hayan pasado muchas cosas. Lo que no ha ocurrido es que la UDA gane en el Mediterráneo en ninguno de los nueve partidos jugados. Eso sí, con algún matiz como el que han pasado por Almería los cuatro que comandan la tabla (Real Madrid, Barcelona, Atlético de Madrid y Sevilla). «Iniciamos una segunda vuelta en la que el calendario en casa no tiene esa exigencia que hemos tenido en la primera con los cuatro equipos de más nivel. Debemos afrontarla para hacer de nuestra casa un fortín», opinó pensando ya en el futuro.

Un tiempo que será necesario para salir de los puestos de descenso. «No nos gusta acabar la primera vuelta en números rojos (descenso)», tal y como ha sucedido. Todo provocado por la endeblez en casa. «Como balance, creo que es bastante evidente que estamos con un déficit fruto de nuestros partidos de casa. Esto es lo que nos está mermando», señaló. Una merma que vino desde la primera jornada cuando recibieron al Espanyol. Uno de los partidos que, a su juicio, el Almería mereció ganar. «Ha habido 2-3, sobre todo, en los que hemos merecido muchísimos más. Clarísimamente hicimos méritos para haber ganado». No se consiguió y el déficit se comenzó a fraguar. «Si hubiéramos conseguido esas dos victorias que, de verdad, creo que nos merecimos, con esos números que nos faltan habríamos firmado una gran primera vuelta».

Hubiera o hubiese

El hubiera o el hubiese no existe en el fútbol, tal y como recalcaba como su frase favorita Hugo Sánchez. Como tampoco es posible echar la vista atrás y seguir lamentándose. Porque mucho se ha hablado de que han pasado por el Mediterráneo los cuatro grandes, cuando han pasado otros equipos que están en la parte baja y no s e les ha ganado por parte de los jugadores rojiblancos. «Sí que hemos tenido rivales en casa de nuestra liga y no hemos podido ganarles. Ya no podemos lamentarnos. La realidad es que no hemos conseguido los puntos».

Pese a verse en la zona baja de la clasificación, quiere ver Corona el vaso medio lleno. Se podría pensar que no le queda otra. «El balance no es del todo positivo. No nos podemos engañar. Pese al déficit que tenemos, estamos muy vivos». Y se aferra a algo que han hecho otros equipos. Poder encadenar tres partidos seguidos con buenos resultados. «Estamos ahí en una posición delicada y apretada. Dentro de lo que va a ser la tónica general hasta el final. Peleando con los equipos que están a nuestro alrededor. Sabiendo que, en pocas semanas, puede cambiar la fotografía de la tabla. Como ha pasado con Córdoba o Elche. Se prestaban a muchos comentarios de que si ya estaban decididos los equipos del descenso. Ahora resulta que están casi más vivos que nadie», apuntó.

Aunque no sea un hombre de números ni quiera pensar en lo que se necesitará al final de temporada para salvarse, sí que considera clave que haya tantos equipos implicados en pocos puntos. «Es cierto que llevamos menos puntos que el año pasado. Como también lo es que, a nivel general, es menor la puntuación de los equipos que están fuera del descenso». Al tiempo, decía Corona que es «muy difícil sacar partidos y está muy igualado todo. 8-10 equipos, incluso Athletic de Bilbao y Real Sociedad, están en un partido».

Una situación, la propia y la colectiva, que era lo que se podía pensar en el vestuario antes de comenzar la temporada. «La teoría de principio de temporada, cuando te imaginas lo que puede ser, se está cumpliendo» . Y como va de teorías o de pensamientos, pese a la mala primera vuelta, Corona se agarra a lo que tenga que pasar en el Mediterráneo. «Hay equipos que están a nuestro alrededor que tienen que venir. Deportivo, Levante, Granada, Eibar, Getafe o Real Sociedad. Estos partidos son, para nosotros, claves», aseguró el talaverano.

Podría parecer que están ya pensando en el final de la competición. En parte puede ser. Pero lo hacen para tener claro en el vestuario que en los «próximos dos meses debemos conseguir ese gran bagaje de puntos que nos permita aspirar a la permanencia». Porque no quiere ni pensar en otra gesta como la de la pasada temporada. Más si cabe viendo que esta campaña el final es ante Celta de Vigo, Málaga, Sevilla y Valencia. Equipos que están, a estas alturas, peleando por meterse en competición europea, tanto en Europa League como en Champions. «Sería difícil de imaginar o no podemos estar a expensas de, con el calendario que tenemos, repetir la situación del año pasado». Recordaba que el 'milagro' de hace unos meses pudo tener su truco. «El fútbol es tan caprichoso que hace que el Athletic de Bilbao no venga a jugarse nada, el Betis tampoco se jugaba nada o vas al campo del Espanyol con ellos salvados». Así que para no tentar mucho a la suerte, «dejarlo para el final supondría muchísimos riesgo».

La pasada temporada tuvieron que hacer 40 puntos para lograr la permanencia. Todo en un tramo final espectacular de 10 puntos de los últimos 12 posibles. El haber acabado esta primera vuelta con 16 puntos, los cálculos dicen que necesitarían ocho victorias para llegar a la cifra del curso anterior. Corona insistió en que después de la experiencia vivida hace un año, prefiere mantenerse cauto. «Soy malísimo para los números. El fútbol me da tortazos cada año. La temporada pasada todo el mundo en el fútbol decía que estaría más barata y al final con 39 no bastó. No puedes anticipar con tanto tiempo». Así que, como dice el Cholo Simeone, «tenemos que pensar en cada partido porque debe ser así. No te llega tanta concentración para pensar en muchos partidos. Hay que volcar la energía en el más inmediato»

Como la está volcando desde que tiene más peso en el equipo. Juan Ignacio Martínez quitó músculo en el centro del campo (Ramon Azeez) para intentar darle más calidad (Corona). El talaverano lo ha agradecido con buenos partidos. Después de varios años, el centrocampista vuelve a una posición que casi tenía olvidada. Ahora, en la mediapunta, está más cerca del área contraria. Ya no está tan atrás como con Lucas Alcaraz, Javi Gracia o el propio Francisco. «Para mi fútbol hay cosas que me vienen mejor y otras, peor. En esa posición te enfrentas, a veces, a los centrales de espaldas. Por mis condiciones, no es para disfrutar de ese hábitat. Por contra, me encuentro más cerca del área. Me permite participar en zonas más decisivas. En cambio, en ocasiones al jugar de mediocentro me he sentido con esa libertad de poder desplazarme un poco más hacia adelante». Lo único que desea «siempre es potenciar mis virtudes y que mis defectos no se conviertan en déficit para el equipo», argumentó.

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