El día después

Habló de dinero, aunque no dijo todo, de su historia reciente, de lo que persiguió cuando era niño y lo que tiene entre ceja y ceja ahora que su camino conduce a lo que había soñado. «Es cierto que a mí me hubiese gustado desde pequeño triunfar en el club de mi tierra, igual que a cualquier jugador que sale de su casa le gustaría, pero no fue así. Decidí seguir mi camino. Ahora en mi cabeza solo está seguir aquí, buscar un futuro mejor y seguir dando que hablar de mí», manifestó el jugador rojiblanco, que ha marcado dos goles en este inicio de temporada.

Cómodo

Édgar habló de un proceso que ha tardado, relativamente, poco tiempo y que le hace estar contento y sentirse valorado en la entidad rojiblanca. «Yo terminaba en 2016 y es cierto que estoy muy cómodo aquí. La verdad es que las negociaciones fueron muy fáciles porque yo quiero estar aquí, es un club donde se trabaja muy cómodo y la verdad es que la relación que tengo con el cuerpo técnico y compañeros es más favorable para que se hagan las cosas así de fáciles».

Todo resultó muy rápido, en pocas semanas, con la intención de que el acuerdo entre ambas partes se prolongue. «Por mí estaré aquí los máximos años posibles» y supone una mejora económica que no se atiene a lo que muchos han expresado. «No es como se dice que cobro 64.000 euros. Eso en Primera división es mentira. El mínimo salarial es de 129.000 y en AFE lo pone bien claro. Las cosas esas no hay que hacerle caso. Yo sé cómo estoy. Ahora sí es cierto que mi renovación es hasta 2018 y seguiré luchando por este club y lo daré todo».

El hecho de renovar por tres temporadas más le da mérito a su trabajo. «Sí, es cierto que termino el año aquí. En navidades del año que viene podría negociar. Ahora es una situación cómoda para los dos y te sientes más valorado en el sentido que ves que el club también te quiere y que yo también quiero», explicó.

Las espaldas guardadas

La operación supone, si llegase el caso, que el club que quiera hacerse con sus servicios tendrá que pasar por caja. «Yo creo que si viene otro club y me compra el club siempre escuchará ofertas y si pasa bienvenido será, pero yo hasta 2018 sigo siendo del Almería y mi intención es seguir aquí».

No en vano, el canario se acuerda de cuándo llegó a Almería y por qué motivos lo hizo, sin pensar en si llegará alguien a por sus servicios. «La verdad es que no me he parado a pensar en eso, sinceramente. Lo que sí es cierto es que, después de la renovación, me sentí muy contento y muy feliz. Está claro que desde el primer momento que vine al Almería B quería seguir vinculado al club porque me gusta cómo trabaja, cómo es y ahora tengo este año y tres más y si puedo seguir lo máximo posible seguiré», dijo con rotundidad.

Ajeno a las cifras de cláusulas porque considera que «es cosa del club y del club que venga», sí considera que lo que se ha comentado es molesto. «No es de buen gusto ver cifras que no son las correctas. Quiero decir que encima de que vengo del B, sí que me quitan mérito de lo que estoy haciendo. Son cosas a las que no hago caso, no le doy importancia. Me quedo con el trabajo que estoy haciendo y con el club cómo está respondiendo por mí».

El papel de Francisco

Si el club está respondiendo por él, tal vez tenga mucho que ver en esa 'relación' el valor que Francisco le ha dado al jugador. Realmente, ha sido quien le ha puesto en el mercado. Édgar llegó a autoimponerse metas, la principal no fallarle. «Ese comentario lo hice yo, en el sentido que si él me abre las puertas y apuesta por mí, yo no le voy a fallar a esa persona». Por eso, su llegada en pretemporada fue una demostración de querer quedarse. «En pretemporada tenía la presión de que tenía que dar más que el resto, ser el primero en todo y tengo que ir por delante de todos. Fue así y ahora va a seguir siendo así porque no puedo fallarle a la persona que me está dando la oportunidad de estar en este equipo».

El técnico rojiblanco le ve de forma diferente a cómo lo vieron los dos técnicos que tuvo el pasado año. «Por supuesto, el año pasado salí de aquí cedido para coger minutos y experiencia y tuve dos entrenadores y la verdad que no cuajé tan bien y no me veían como me ve Francisco. Francisco claro que es fundamental en lo que me está pasando».

Ese 'mecenazgo' le sirve para ser ejemplo de las bases del fútbol almeriense, de los jugadores que están en las categorías inferiores. «Está claro que el jugador del filial que trabaje bien, jugadores como Iván, que lo está haciendo superbien, Antonio Puertas, está claro que pueden estar aquí en cualquier momento. Si el Almería es un club que da la posibilidad de que los canteranos estén donde se merecen si rinden bienvenido sea», expuso.